Seguramente te has fijado en la tubería de la casa, o en los cables de electricidad, y te has preguntado por qué son de color rojizo. La respuesta es sencilla, porque están hechos de cobre, uno de los metales más valorados por sus propiedades de conducción térmica y eléctrica.
El cobre es el cuarto metal que más se produce en México y Sonora el estado líder con más del 85% por ciento de la producción total, seguido por Zacatecas y San Luis Potosí.
El descubrimiento del cobre va más allá de 5 mil años A.C. en los pueblos de Mesoamérica. En México se tienen registros que el cobre se tuvo y empleó en lo que hoy es el Estado de Michoacán.
Características
El cobre es un metal característico por su color rojizo y con tonalidades brillantes, es maleable, dúctil y un buen conductor.
El cobre es el mejor conductor de electricidad entre los metales no preciosos.
Su uso en la vida cotidiana
Por su capacidad de aleación con otros metales también resulta muy útil, y un ejemplo de ello son las monedas en muchos países elaboradas con este metal.
El latón, una aleación de cobre y zinc, se usa para la elaboración de variados productos como los siguientes:
- Cableado de edificaciones, tuberías de agua y de gas, sistemas térmicos, techumbres, terminaciones, o como componente estructural.
- Clave para la generación y distribución eléctrica ya que es un excelente conductor de esa energía. Es la materia prima más común en la fabricación de cables telefónicos, y el desarrollo de nuevas tecnologías para aumentar la eficiencia en la transmisión de datos.
- Monedas, utensilios de cocina, joyería, objetos de arte, adornos, muebles, maquillajes, pinturas, instrumentos musicales, entre otros.
- Presente en automóviles, trenes, aviones, barcos e incluso en vehículos espaciales. Es utilizado en los motores, en los sistemas electrónicos y en los sistemas eléctricos.
- Algunos de los nuevos usos del cobre van desde calcetines hasta equipamientos médicos. Los calcetines para diabéticos tienen un diseño diferente: la fibra con cobre cubre todo el pie para protegerlo de hongos y otras infecciones.
- Otro uso es en antifaces y fundas de almohadas ya que se demostró que podía reducir las arrugas, devolver la tonalidad de la piel y, en el caso de las almohadas, evitar la proliferación de ácaros.
- Otras aplicaciones en lo que se emplea ese metal es en colchones y filtros, así como en productos de látex, como preservativos y guantes.
- Ayuda al sector productivo ya que patógenos que afectan a plantas y peces de interés comercial también han mostrado ser endebles al metal, de modo que es posible generar desarrollos en el área de la agricultura o piscicultura que protejan los productos y contribuyan a mantener su calidad.